El uso excesivo del celular puede tener efectos negativos en nuestra salud mental y física. Pasar largas horas frente a la pantalla del teléfono puede afectar nuestra vista, causando cansancio ocular, dolor de cabeza y problemas de visión a largo plazo.
Además, el uso del celular puede provocar problemas en las relaciones interpersonales. Pasar más tiempo conectados a nuestros dispositivos electrónicos que con las personas que nos rodean puede generar aislamiento social y dificultades para comunicarnos de forma efectiva cara a cara.
Otro aspecto negativo del uso excesivo del celular es la falta de atención que podemos prestar a nuestras responsabilidades diarias. Revisar constantemente el teléfono móvil puede disminuir nuestra productividad en el trabajo o el estudio, afectando nuestro rendimiento y nuestra capacidad para concentrarnos en las tareas importantes.