El plástico que tiene burbujas de aire se llama plástico de burbujas. Este tipo de material se caracteriza por tener una capa protectora compuesta por burbujas de aire en su interior. Las burbujas de aire actúan como amortiguadores, proporcionando mayor protección contra golpes y impactos.
Otro nombre común para este tipo de plástico es plástico de burbujas de aire. Se emplea principalmente en la industria de embalaje para proteger productos frágiles durante el transporte y almacenamiento. La capa de burbujas de aire ayuda a reducir el riesgo de roturas y daños en los artículos envasados.
Además, el plástico de burbujas de aire es ligero y flexible, lo que facilita su manipulación y adaptación a diferentes formas y tamaños de productos. Su uso se ha popularizado también en aplicaciones de bricolaje y manualidades, para proteger objetos delicados en procesos de envío o almacenamiento.
Cuando vemos el plástico de burbuja, es común preguntarnos ¿qué tipo de plástico es? Este material tan utilizado para proteger objetos frágiles tiene un nombre específico: polietileno de baja densidad. Este tipo de plástico es muy ligero y flexible, lo que lo hace perfecto para envolver objetos y protegerlos durante el transporte. El plástico de burbuja está formado por pequeñas bolsas de aire atrapadas entre dos capas de polietileno, lo que lo hace ideal para amortiguar golpes y proteger objetos delicados.
Las bolsas con burbujas de aire suelen utilizarse como material de embalaje para proteger objetos frágiles durante el transporte. Estas bolsas son conocidas por su característico aspecto inflado, creado por las pequeñas burbujas de aire que contienen en su interior.
Las bolsas con burbujas de aire son un tipo de envoltorio flexible y ligero, que se adapta fácilmente a la forma del objeto que se está protegiendo. Este material es muy utilizado en la industria del envío de paquetes y en el comercio electrónico, ya que brinda una capa adicional de protección a los productos durante el traslado.
Existen diferentes tamaños y formas de bolsas con burbujas de aire, dependiendo del tamaño y fragilidad de los objetos que se deseen proteger. Algunas bolsas vienen en formatos individuales, mientras que otras se presentan en rollos para que el usuario pueda cortar la cantidad necesaria según sus requerimientos.
La Poliburbuja se fabrica a partir de un proceso de extrusión, el cual consiste en fundir resinas de polietileno y luego hacerlas pasar a través de una máquina extrusora que les da forma y las convierte en láminas continuas de burbujas.
Una vez obtenidas las láminas de Poliburbuja, éstas se pueden cortar a diferentes tamaños y se les pueden aplicar distintos tratamientos para mejorar sus propiedades, como por ejemplo añadir aditivos para hacerlas resistentes a los rayos UV o darles propiedades antiestáticas.
Finalmente, las láminas de Poliburbuja se enrollan en rollos o se cortan en hojas individuales, listas para ser utilizadas en diferentes aplicaciones como embalaje de productos frágiles, aislamiento térmico o acolchado para proteger objetos durante su transporte.
Poli burbuja es un material de embalaje utilizado para proteger objetos frágiles durante el transporte.
Está compuesto por una capa de polietileno de burbujas de aire atrapadas entre dos láminas de plástico.
Las burbugas de aire actúan como amortiguadores, absorbiendo impactos y protegiendo el contenido de golpes y caídas.
Este material es ligero, flexible y resistente al agua, por lo que es ideal para envíos que requieren protección adicional.
La versatilidad del poli burbuja lo hace adecuado para envolver cualquier tipo de objeto, desde electrónicos hasta cristalería.
Además, es un material Eco-friendly, ya que es reciclable y no contamina el medio ambiente.